3

Cómo saber si estoy sufriendo violencia psicológica [Incluye frases clave]

Cómo saber si estoy sufriendo violencia psicológica

Los efectos de la violencia psicológica son tan perjudiciales como los de la violencia física.

La trampa que hace que algunos piensen lo contrario es que los golpes y moretones son evidentes a simple vista.

En cambio, las palabras y otras acciones, no.

Sabemos que no es fácil afrontar un caso de violencia psicológica porque cuando se quiere hacerlo es inevitable sentir miedo y pensar en las consecuencias.

Frente a este escenario, y antes que todo, es fundamental aprender a reconocer cuando se da el abuso psicológico.

Comencemos por entender qué es la violencia psicológica.

¿Qué es la violencia psicológica?

Es cualquier acción diseñada o ejecutada con la finalidad de someter a través de abusos específicos que, generalmente, no están relacionados con la violencia física.

En este caso, el agresor o agresora apela a comentarios hirientes, acusaciones falsas, difamación y otras acciones para dañar a alguien más.

Ejemplos de violencia psicológica

En casos de abuso o violencia psicológica, lo primero que se nota es el desbalance de poder.

En la relación, del tipo que sea, alguien usa su cargo o posición, incluso su fuerza física, como un elemento de manipulación.

El razonamiento primario es de este tipo:

“Si yo soy quien tiene más fuerza o poder, entonces puedo decirle o manipular  a otra persona como quiera”.

Algunos ejemplos son:

Acusación y culpa

Quien ejerza la violencia psicológica, acusará a otro de algo que no haya hecho o, si en realidad lo hizo, entonces apelará a la culpa para exigirle que haga o actúe a su antojo.

La difamación es un arma que ridiculiza al otro y le hace inhibirse en ciertos círculos.

 Cómo saber si estoy sufriendo violencia psicológica
Si alguien ejerce violencia psicológica sobre ti, buscará que le des explicaciones y justificaciones que siempre usará en tu contra.

 

Control

Imagina el momento de la comida y que alguien te insista tanto en lo que debes comer que cambies de opinión o que, cuando pidas lo que quieres comer, esta persona no haga más que criticar tu elección.

La violencia psicológica se ejerce con control.

El control se nota en limitaciones tan aparentemente insignificantes como lo que alguien debe comer, cómo debe vestirse, con quién debe relacionarse y qué debe opinar acerca de cualquier tema.

Decimos insignificante no porque estas limitaciones lo sean, sino porque pasan disimuladas en sugerencias repetidas que pueden llegar a disfrazarse con tono amable.

 

Codependencia

¿Sientes que alguien es indispensable para ti? ¿Que no puedes vivir, trabajar o estudiar sin esa persona?

Tal distorsión puede haberse generado por tu propia cuenta, pero también puede deberse a que alguien, basado en el desbalance de poder, haya causado esta percepción.

Presta atención si tu pareja, jefe o amigo te hace pensar que solo él o ella pueden darte lo que necesitas y solo él o ella son capaces de hacer algo que aparentemente tú no.

 

Crítica

Una forma de menoscabar la confianza de alguien es criticándolo todo lo que se pueda.

Quien ejerce la violencia psicológica lo sabe y entiende que cada crítica es una forma de agredir al otro.

Es una forma de “demostrarle” que nada de lo que hace está bien y que, por deducción, es una persona que no tiene la capacidad para tomar buenas decisiones.

 

Egoísmo emocional

Aunque este término no está categorizado dentro de ninguna corriente de la Psicología, explica cómo es que las emociones de alguien que ejerce violencia psicológica están siempre en primer plano.

Por tanto, las emociones y sentimientos del afectado pasan a ser irrelevantes, una exageración o cualquier otra categoría que le reste importancia.

 

La violencia psicológica es culpa del afectado

Si el agresor hace una ofensa, su argumento será que es culpa del otro y hará todo lo que esté a su alcance para demostrar que se lo merece.

Este razonamiento le sirve al victimario para ir anulando respuestas defensivas del otro, pues la víctima asume que para evitar una agresión debe actuar de una forma en la que no provoque la violencia.

Cómo saber si estoy sufriendo violencia psicológica
Una víctima de violencia psicológica será considerada como culpable de las agresiones que recibe por parte del victimario.

Violencia Intrafamiliar psicológica

Lamentablemente es en la familia en donde comienzan los casos de violencia psicológica.

Si prestas atención, verás cómo algunos padres exigen tanto a sus hijos hasta que llegan al punto de anularlos, de hacerles sentir que están destinados a equivocarse o a actuar con miedo.

Lo que estos padres ignoran u omiten es que equivocarse es necesario para la formación y el aprendizaje de sus hijos, pero sobre todo que las equivocaciones van a depender del ojo con que se miren.

Lo que para unos puede ser una equivocación, para otros no.

Situaciones de sobreprotección en las que los padres buscan comprobarles a los hijos que ellos no pueden hacer nada por sí solos son también una forma de violencia psicológica que tarde o temprano se reflejará en el trato que den a otros cuando crezcan.

 

Frases de violencia psicológica

Aunque las frases no tienen que ser idénticas a estas, la forma en la que están construidas te permitirá reconocer si alguien ejerce o pretende ejercer violencia psicológica sobre ti.

  • Si te grito o te maltrato es por tu bien.
  • Si te grito o te maltrato es porque tú me provocas.
  • Déjame elegir por ti. Tú nunca haces nada bien.
  • Me haces enfadar tanto que me cuesta controlarme.
  • No me gusta que hables con esa persona
  • Si colaboras, te va a ir bien
  • “Eres un tonto” en lugar de “cometiste un error”.

 

Conclusión acerca de «Cómo saber si estoy sufriendo violencia psicológica».

Si la pregunta por la que llegaste a este artículo fue «¿  Cómo saber si estoy sufriendo violencia psicológica  ?» , esperamos haberte dado claves específicas para reconocer cuando estés en presencia de alguien que esté agrediéndote en lo psicológico.

A veces creemos que ciertos tratos nocivos son normales. Y no, que algo se haga común no significa que sea normal ni sano.

Si te cuesta detectar la violencia psicológica, te sugerimos que encuentres ayuda terapéutica profesional.

 

Comparte este artículo