Nuestra historia como seres inteligentes, creativos y capaces de utilizar herramientas se remonta a las primeras adaptaciones que las personas primitivas pudieron hacer y pasar a sus sucesores al enseñarles su uso. A día de hoy numerosos estudios se dedican a explorar las teorías más apropiadas para explicar el proceso en que aprendemos y cuáles elementos inciden en mayor instancia para poder incluir nuevas estrategias al entorno educativo.
Hacer un repaso por las principales teorías con validación científica nos puede ayudar a comprender el funcionamiento de nuestras capacidades y habilidades y como potenciarlas desde la primera infancia
Definición de aprendizaje
Se puede definir como el proceso en que se adquieren conocimientos, valores o habilidades produciendo un cambio perdurable en la conducta a partir de dicha experiencia. Además, esta experiencia puede darse a modo de instrucción, razonamiento, observación o acción en sí misma.
Por lo tanto, no está relacionado a la memorización de datos que se puedan replicar a corto plazo sino al cambio significativo como una de las funciones esenciales en el ser humano y los animales que ha permitido el desenvolvimiento en el medio y la transmisión de estrategias y principios que se aprenden de la familia y cuidadores primarios. Los factores que intervienen son el medio, el nivel de desarrollo y la estimulación temprana que sienta una base para aprendizajes posteriores.
Desde el siglo pasado se han formulado distintas teorías contemporáneas que varían en relación a cómo se pueden responder preguntas cómo: ¿Cómo ocurre el aprendizaje?, ¿Cuáles factores influyen en el aprendizaje? y ¿Cuáles tipos de aprendizaje se explican mejor con esta teoría?
Teoría Conductista
Para el conductismo el aprendizaje se mide en función de cambios observables en la conducta, por efecto del condicionamiento clásico u operante al dar una respuesta apropiada tras la presentación de un estímulo específico o por reforzamiento.
De este modo, explica el aprendizaje en términos de eventos ambientales y considera que los fenómenos mentales no son necesarios para dar explicación al mismo. Por ello los enfoques conductistas de educación integran ciertos estímulos que al realizar la selección se asocian a efectos sonoros, símbolos que indican si se acierta la respuesta.
Se podría decir que este enfoque se relaciona con la clásica implementación de premios y castigos para ciertas situaciones en relación al comportamiento de los estudiantes, aunque actualmente son técnicas discutibles que han sido reemplazadas.
Teoría Cognitiva
Esta teoría reconoce la importancia de cómo se codifica, filtra, organiza, categoriza y evalúa la información por medio del sistema nervioso central y la manera en que intervienen los procesos de atención, memoria y razonamiento. Por ello, ha proporcionado aportaciones a los procesos de enseñanza-aprendizaje y difiere de otras visiones simplistas que posicionan al ser humano de una forma reactiva.
En este sentido, en relación a los esquemas que formamos cada individuo desarrolla diferentes representaciones del mundo, llevándolo a interpretaciones que van siendo más sofisticadas o abstractas.
Constructivismo
Afirma que el aprendizaje es esencialmente activo, donde cada persona puede incorporar experiencias previas al momento que aprende algo nuevo para hacer que eso forme parte de sus estructuras mentales. De esta forma la nueva información se agrega en la red de conocimientos y experiencias pudiendo apreciar que se trata de un proceso subjetivo (en lugar de ser considerado objetivo o pasivo) donde el alumno activamente construye su conocimiento.
El constructivismo, bajo este principio orienta a los estudiantes para que logren transformar la nueva información, reacomodar e internalizar el conocimiento dentro de su estructura; Por lo tanto, afirma que las personas construímos en gran parte aquello que aprendemos, esta teoría se influencia de las perspectivas teóricas de los autores Piagey y Vygotsky.
Constructivismo social
Esta teoría o enfoque explica que requerimos de un entorno cultural para aprender, interpretando que el aprendizaje es un proceso social y que requerimos de las interacciones con terceros para construir los conocimientos. Por ello el conocimiento se convierte en el reflejo del mundo externo donde interviene el lenguaje, las creencias, la cultura y las relaciones con los demás.
Sus referentes principales son Bandura (aprendizaje por observación) y Vigotsky (zona de desarrollo próximo), el maestro es un mediador que se dedica a desarrollar habilidades, actitudes y conocimientos a partir de lo que ya ha almacenado su alumno para lograr conectar con aprendizajes nuevos. De este modo, aunque esta teoría no desestima el constructivismo psicológico lo considera incompleto para dar explicación al proceso de aprendizaje.
Aprendizaje experiencial
Sostiene que el conocimiento se forma a partir de la transformación que ejercemos al conocimiento por nuestra experiencia, así pues concretamente se le está movilizando a una conceptualización abstracta a través de nuestras nuevas experiencias. Esto significa que la experiencia no pasa por nosotros de forma pura e intacta, sino que se modifica tiñéndose con nuestra experiencia en este tipo de aprendizaje
Se considera también como una asociación de métodos que tratan de incrementar el potencial de los que aprenden al profundizar en su experiencia, de este modo se destaca un aprendizaje operativo (conformados por la experiencia real, la introspección sobre la experiencia real y el reconocimiento para dar lugar a nueva información. La persona, en función de sus nociones de razonamiento (sobre deducciones anteriores) y la puesta en práctica de nuevos esquemas a nuevas experiencias es lo que permite solucionar problema de la vida cotidiana.
Conectivismo
Esta teoría del aprendizaje suele categorizarse como “una teoría del aprendizaje para la era digital” donde se toman las distintas limitaciones del conductismo, el cognitivismo y el constructivismo para explicar el aprendizaje complejo dentro del mundo social-digital que se encuentra en evolución constante. Así pues, explica el efecto de la tecnología en nuestras vivencias actuales, la manera en que nos comunicamos e integramos con complejidad los componentes de las tres teorías mencionadas anteriormente.
Según este modelo el aprendizaje se puede comparar a las conexiones dentro de una red de datos con nodos, esto asemeja la forma en que el Sistema Nervioso Central puede crear redes neuronales y actualizar nuevos caminos por la existencia de la neuroplasticidad.
