Tener una buena capacidad intelectual y mantener la agudeza mental es muy importante en todos los momentos de la vida, no solo durante la etapa de estudios o en la vida profesional. En todos los casos, una buena memoria depende de la salud y vitalidad del cerebro. Es un hecho que el envejecimiento es un proceso que degenera muchas funciones del organismo incluyendo las funciones cognitivas, sin embargo este proceso no es lineal ni se presenta del mismo modo para todos.
Muchos estudios han revelado que en algunos adultos mayores se activa un fenómeno de compensación relacionado con algunas áreas del cerebro que les permiten mantener un mejor estado de sus facultades ¿tiene esto relación con los procesos de aprendizaje? Continúa con la lectura para saber más al respecto.
La plasticidad neuronal en el ser humano
El primer año de vida es fundamental para el desarrollo neuronal, aunque resulta de hecho fundamental para todos los procesos del ser humano como se ha demostrado con la capacidad de socialización, la estimulación temprana revierte muchos aspectos de daño neuronal que se pueden acarrear del embarazo o el parto. Lo que no muchos reconocen es que este proceso de desarrollo mediante el aprendizaje por experiencia se lleva a cabo durante toda la vida.
La plasticidad cerebral, denominada así por su referencia a como la plastilina se puede moldear fácilmente, es un fenómeno que ocurre en el sistema nervioso central y hace referencia al comportamiento de las neuronas y células gliales al crear diversas conexiones en lo que se conoce como redes neuronales. Estos nuevos caminos para la sinapsis favorecen el desempeño del cerebro y permite a las neuronas regenerarse con mayor facilidad al reestructurarse.
¿Cómo se relaciona la neuroplasticidad con el aprendizaje?
Ante los nuevos estímulos y experiencias, el cerebro elabora nuevas conexiones neuronales que favorezcan y agilicen la comunicación entre células nerviosas desde el terminal presináptico hasta sus dendritas, siguiendo este camino una y otra vez en cada milésima de segundo para mantenernos funcionales, conscientes y en nuestras mejores capacidades.
En este sentido, cada nueva experiencia y aprendizaje apoya la reestructuración neuronal. Estas vías o circuitos neuronales son modelados como rutas que se crean cuando son reforzadas con la práctica y la repetición, pero también se podan cuando no son utilizadas por la persona. Aunque la edad más propia para la adquisición del aprendizaje es en la infancia, durante toda la vida se puede contar con la regeneración de vías de comunicación neuronal si se cuenta con las condiciones propias para ello. Seguir aprendiendo es seguir dando movimiento a nuestro cerebro.
La paradoja de la neuroplasticidad
Se dice que existe una paradoja respecto a la neuroplasticidad porque mientras más reforzamos una ruta de comunicación neuronal repitiendo un comportamiento, nos encontramos ante un camino seguro y muy marcado que comenzará a influir en la tendencia de quedarnos cómodos con esa manera de actuar, pensar, comportarse, etc. Así pues se van tomando esos comportamientos más rígidos que no favorecen a la plasticidad y nos estancan de formas que disminuyen la calidad de vida, pudiendo ser responsable de trastornos e incluso explicando la adicción a las drogas.
Mejora la neuroplasticidad
Mejorar la plasticidad cerebral es un objetivo pertinente y que nos dirige al camino correcto para nuestro desenvolvimiento en cualquier medio que decidamos para nuestra vida y nuestra vejez. Permite al cerebro recuperarse de lesiones o trastornos dada la capacidad de que áreas estructurales sanas adapten sus funciones para suplir algún área dañada, pueden ocurrir fenómenos como la activación de ambos hemisferios para suplir una necesidad.
Aún más, para jóvenes o adultos mayores continúa siendo posible mediante la realización de tareas intelectuales y actividad mental para inducir la neuroplasticidad y desencadenar cambios en el cerebro. Algunas de las formas gratuitas y al alcance de todos para mejorar la neuroplasticidad te las contaremos a continuación.
Resolver problemas lógicos
Pocas cosas movilizan más nuestras habilidades cognitivas como los juegos de resolución de problemas y de pensamiento lógico y espacial. Probablemente te imaginas algunos clásicos de este tipo, los rompecabezas, ajedrez, damas, memorias y otros juegos de mesa que ponen a trabajar nuestro raciocinio y la lógica.
Actualmente se le suman juegos de video o aplicaciones telefónicas gratuitas que cuentan con juegos que fomentan las mismas capacidades, es por eso que tomar algo de nuestro tiempo libre para divertirnos mientras reforzamos es una actividad bastante agradable. ¡Juega, resuelve, pon tus neuronas a trabajar!
Desarrollar habilidades en ambas manos
Todos contamos con una mano dominante que tiene mayor habilidad y destreza que la otra, es por eso que nos dividimos en zurdos o diestros y solemos estar bastante conformes con eso.Comienza a utilizar tu mano no dominante para más propósitos, batir los huevos, cepillarnos los dientes o tomar el cubierto para comer, ¡esta simple práctica está sacando a tu neuronas de su zona de confort! Sus rutas cómodas deberán posponerse y se crearan nuevas conexiones.
Deportes y actividad física
Practicar un deporte nuevo además de implementar las bases del aprendizaje por experiencia y la práctica, Sin embargo, el deporte y la actividad física tienen otros efectos ya que implican la liberación de oxígeno en mayores cantidades para las estructuras cerebrales y la liberación de adrenalina y oxitocina en el Sistema Nervioso Central. Otros estudios afirman que la actividad realizada en ejercicios anaeróbicos también tiene importante repercusión, ya que potencia las funciones ejecutivas que incluyen la capacidad de planificación, gestión del tiempo y resolución de conflictos.
Terapia y rehabilitación
En pacientes que han sufrido lesiones, contusiones o ACV resultando en el daño de algunas estructuras cerebrales o de aspectos funcionales el uso de la plasticidad cerebral para recuperar funciones neurológicas es un aspecto fundamental para un buen pronóstico. Así como trastornos neurológicos de deterioro cognitivo, alzheimer o parkinson, que por ser orgánicos no se descarta de un plan para sus vidas.
Es por eso que en el menor tiempo posible lo recomendable es acudir a terapia, neuro rehabilitación o fisioterapia según sea el caso concerniente, en estos casos el tiempo es oro para mejores resultados.